Emoción movimiento o impulso, lo que mueve hacia. definen procesos de variación en el estado de ánimo como exaltación, éxtasis, alegría, excitación, pasión, ternura
Laab Akaakad - Redactor
Emoción. Estímulo para el alma
Entre los sentimientos se desenvuelven diferentes tipos de emociones, inherentes a los estados de ánimos y asidos a los pensamientos que quieren ser acciones en cada ser humano. Estas fomentan misiones emotivas, labores automáticas, diferentes quehaceres y hechos que destacan proezas, iniciativas, funciones profesionales, obligaciones ejercidas con firmes propósitos, mientras que en otros ámbitos negativos se destacan las maniobras temerarias y premeditadas, maquinaciones, tejemanejes, intrigas, pleitos, manipulaciones y su afán muy empeñado en las actuaciones conductuales con sus osadías y desvalores.
Emoción viene del latín emotio, que significa movimiento o impulso, aquello que te mueve hacia.
En psicología se define como un sentimiento o percepción de los elementos y relaciones de la realidad o la imaginación, que se expresa físicamente mediante alguna función fisiológica e incluye reacciones como agresividad y llanto, sensibilidad, afabilidad y sociabilidad.
Las emociones tienen una función adaptativa de nuestro organismo a lo que nos rodea. Es un estado que sobreviene súbita y bruscamente, en forma de crisis más o menos violenta y casi siempre pasajera.
Las emociones son reacciones psicofisiológicas que figuran adaptación en estímulos del ser humano. Las emociones alteran la atención, hacen subir de nivel ciertas conductas propiciando respuestas e impulsando acciones relevantes en la memoria.
Las emociones organizan rápidas respuestas en el sistema biológico, incluidas las expresiones faciales, la musculatura, la voz, la actividad del sistema nervioso autónomo y la del sistema endocrino, a fin de establecer un medio interno óptimo para el comportamiento más efectivo. Esta acción se determina fisiológicamente.
Conductualmente, las emociones sirven para establecer nuestra posición con respecto a nuestro entorno, y nos impulsan hacia ciertas personas, objetos, acciones, ideas y nos alejan de otros. Las emociones actúan también como depósito de influencias naturales y aprendidas, y poseen ciertas características invariables y otras que muestran cierta variación entre individuos, grupos y culturas.
En este mismo marco emotivo se encuentran uno de los más negativos como lo es los celos, desconfianza, apatía, ira, compulsividad. Arrebatos que ha causado estragos en la idiosincrasia y por su acción se han cometido crímenes pasionales y millar de acciones enmarañadas con el odio, la vanidad y el orgullo.
La emoción tiene procesos de juicio que remueven y activan situaciones desprovistas de la razón y la conciencia. Entre ellas la turbación, alteración, desconcierto, conmoción por hechos, que relacionan angustia, dolor, inquietud y temor.
Otros estados de las emociones no negativas sino efectivas y objetivas, se definen los procesos de variación en el estado de ánimo como la exaltación, éxtasis, alegría, excitación, pasión, ternura, amor, compasión, piedad, humanidad. Interés por ayudar con solidaridad.
Encontramos otro tramo muy aferrado a los aspectos negativos como lo es: Insensibilidad, lo que llamamos dureza de ser o de corazón, frialdad, indiferencia y desamor. En este renglón se enfilan, la deslealtad, la infidelidad, la traición, la tibieza, el placer y el sexo desmedido.
Sentimientos hay muchos, implícitos con variables de acción en desunión por incompatibilidad.
Podemos leer un acto de emotividad y solidaridad mística que explica en el libro 1 Corintios 13, donde expone sobre las preeminencias del amor.
1 Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o címbalo que retiñe.
2 Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy.
3 Y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y si entregase mi cuerpo para ser quemado, y no tengo amor, de nada me sirve.
4 El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece.
5 no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor;
6 no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad.
7 Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
8 El amor nunca deja de ser; pero las profecías se acabarán, y cesarán las lenguas, y la ciencia acabará.
9 Porque en parte conocemos, y en parte profetizamos;
10 más cuando venga lo perfecto, entonces lo que es en parte se acabará.
11 Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, juzgaba como niño; más cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño.
"Emoción una directriz para sabernos guiar"Akaakad
12 Ahora vemos por espejo, oscuramente; más entonces veremos cara a cara. Ahora conozco en parte; pero entonces conoceré como fui conocido.
13 Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor.
El desenlace de las preeminencias del amor concluye que no habrá otra cosa que supera el amor, y aunque el individuo haga miles de peripecias y en el amor hace desastres, quedando relegado las buenas acciones a sus semejantes, de nada le sirva que haga miles de cosas para hacer ver que ama a su prójimo y que es leal con su corazón. Las falsas emociones en los sentimientos desvirtúan las acciones.
Un hombre o una mujer dicen amar a sus hijos, pero le son desleal a su pareja, entonces no aman a sus hijos, únicamente profesan falsas palabras.
Cualquier ser pensante que dice creer en Dios como padre celestial, pero no lo honra, y hace todo lo contrario a lo que manda Dios a que haga cada ser humano, entonces no cree en Dios, ni le sirve, ni le honra. Simplemente es desleal, sencillamente es ingrato a cualquier causa, acción o planteamiento que exprese. Esconde dentro de su ser, lo contrario a lo que sería las buenas acciones. Es egoísta, intrigante y fementido. Ejemplo de ello es una pareja que sale de viaje y la otra parte queda en casa con sus hijos, mientras la otra juega a la clandestinidad, regresa sonriente como si nada malo hubiese hecho. Luego preguntan por qué me pasan cosas, por qué no tengo suerte, por qué tengo tormentos y por qué no tengo paz.
La emotiva paz es la acción que más sensibilidad enlaza y unifica. El principal elemento es la armonía, es la que interrelaciona la amistad con concordia, es con la que se logran las alianzas verdaderas y conciliación. Ella proporciona sosiego, afabilidad, equilibrio. Es la tregua para toda reconciliación. Si de lo positivo nada sucede en los corazones humanos, pronta está la ruptura, la hostilidad para comenzar con la guerra.
Guerras no sólo son aquellas que se inician con mesnadas o ejércitos; las primeras se inician en el pensamiento de cada persona, luego pasan a ser enfrentamientos internos con descontento y encolerizadas acciones. Es en el seno de cada hogar destruido por la infidelidad, traición y desamor donde comienzan las guerras ofensivas contra la familia y esparciéndose hacia la sociedad.
La ruptura de la familia trae graves consecuencias hacia los hijos, la estabilidad laboral y el equilibrio del estado emocional en cada individuo.
El adulterio y la fornicación es un crimen prestablecido en la sociedad que se ha instituido con muchas excusas en el desenvolvimiento de cada ser humano. Como ojos que no ven, corazón que no siente, y entre las máximas, no importa que lo haga con otra mientras me dé a mí y a mis hijos. Suena feísimo, es fatídico, pero es lo que dicen. La emoción con sus componentes con estímulo para el alma ha edificado y fundado imperios, pero también han caído, como sucedió en babilonia, Egipto, las dinastías chinas, los imperios toltecas, los mayas y los Incas.
En la actualidad la emoción se deja llevar por pasiones desmedidas y el conjunto de ideas y satisfacciones enumeradas como lo que quiero lo tengo, y si me lo propongo lo obtengo. Este es el mundo diezmado en que vive la actual humanidad. La instigación cada vez lleva a la sociedad y sus componentes a su propia persuasión y a lo que todos conocemos como tentación. Déjate comprar, déjate seducir, acepta incentivos y el aguijón penetrará tu alma hasta caer en el más profundo foso.
El cebo para las abejas son las flores, para el ratón el queso, para el gato la leche, para el perro un filete, para las aves frutas y para otras semillas. Igual para el ser humano, que aun teniendo más aptitud para pensar y discernir cae más fácil que cualquier otro animalito de la creación.
La psicología explora conceptos como la percepción, la atención, la motivación, la emoción, el funcionamiento del cerebro, la inteligencia, la personalidad, las relaciones personales, la consciencia y la inconsciencia.
Pero véase cada ser pensante como una entidad de acoplamiento y definición, que sabiendo todos los laberintos que tiene, escudríñese y active por sí mismo las zonas vulnerables y aquellas que pueden autodefinir su comportamiento. Esta ayuda idónea viene a darse de acuerdo sus valores, su capacidad y destreza en su desarrollo emocional y conductual.
Recuperar cada ser sus aspectos místicos y deliberar en los cambios por dar y analizando lo que se ha abandonado y como el mundo se ha enfrentado al mayor desquiciamiento en los últimos tiempo debido al encarecimiento de los valores espirituales que ha perdido por sus demandas en el pensamiento liberado de actitud actual.
Es propicio exponer que retomar los valores espirituales reordenaría la sociedad, la conducta individual y colectiva. No es expresamente el aspecto religioso, sino los denuedos que importan, equilibrios mentales, emocionales, psicológicos y psico espirituales. La persona espiritual es aquella preocupada por cuestiones relacionadas con el sentido de la vida, con la verdadera naturaleza del ser humano. Se hace preguntas como: ¿quién soy realmente? ¿Por qué estoy aquí? ¿Qué pasa tras la muerte? ¿Tenemos un alma inmortal? ¿Tengo una misión o destino en mi vida?
Conocemos y usamos habitualmente las leyes de la física para hacer cosas que, en el pasado, parecería magia, como trascender o comunicarnos con alguien que está a grandes distancia en otro continente, pero, ¿existen unas leyes espirituales en concordancia con poderlo hacer espiritualmente sin mover mi ser físico? Y si es así, ¿cuáles son y cómo funcionan?. Qué debo hacer para que esto pueda ejercerlo y ejecutarlo sin fines controversiales, sino evolutivos y espirituales. Con la razón de estar más cerca de los seres amados y del Creador cósmico.
No estés en guerra contigo mismo, menos con nadie. Lleva excelentes emociones para tu alma.
Laab Akaakad
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